El aprendizaje social es una de las dimensiones más importantes de la experiencia educativa que pueden ofrecer las universidades. Pero ¿qué es el aprendizaje social? ¿Por qué es importante? Y ¿cómo ayuda ChallengeHub a los docentes y sus centros a mejorar el aprendizaje social en sus aulas?

La mejor forma de aprender algo es enseñarlo

Como todo docente sabe muy bien, la mejor forma de aprender algo es explicándolo a otros. Por ejemplo, me fijé en que en mis clases de ecuaciones diferenciales los alumnos entendían con más facilidad cuando podían ayudarse unos a otros con sus problemas. Imaginemos que tengo dos alumnos, Alicia y Roberto. Alicia acaba de aprender a obtener las soluciones exactas de las ecuaciones diferenciales, pero Roberto está teniendo algunas dificultades. Si Alicia ayuda a Roberto a superar sus dificultades, podrá identificar lagunas en su propio entendimiento. Alicia también puede entender las dudas de Roberto mejor que un docente como yo, que aprendí este concepto hace muchos años.

Y como Roberto puede hacerle preguntas directamente, es como si tuviera una profesora particular. Por supuesto, yo siempre estoy a mano para ayudar a los alumnos que necesitan más ayuda o una explicación más general.

Esta experiencia es un ejemplo clave del aprendizaje social, y es algo para lo que las universidades están perfectamente posicionadas. En los casos en que tanto el “profesor” como el “alumno” son estudiantes, se suele llamar a esto instrucción entre pares. Lo que ChallengeHub hace es optimizar esta instrucción entre pares, y facilitar su implementación a cualquier escala.

ChallengeHub mejora el aprendizaje social

ChallengeHub asegura que la posibilidad de que los alumnos se ayuden unos a otros no quede al azar, llevando el aprendizaje social a otro nivel.

Imagine que, como estudiante, sabe que si va a clase (ya sea online u offline) tiene garantizada una explicación personalizada y efectiva para las dudas que tiene, aunque haya otros 100 alumnos más.

ChallengeHub consigue esto llevando un seguimiento de las interacciones de los alumnos con ChallengeBot: sus respuestas correctas e incorrectas, la dificultad que perciben, etc. Cuando los equipos de trabajo están habilitados, nuestro algoritmo usa esa información para agrupar a los alumnos de forma que se maximice el efecto pedagógico. Se asigna de forma automática a los alumnos a un grupo con otro alumno que les pueda dar la ayuda que necesitan. A menudo ChallengeBot puede construir los grupos de forma que todos los alumnos del grupo puedan hacer de profesor, y todos los alumnos puedan aprender los conceptos a fondo gracias a enseñarlos a sus compañeros. Esta forma de aprendizaje social escala de forma natural y efectiva para clases muy numerosas.

Un entorno de aprendizaje que fomenta la interacción

Ahora que hay muchos “profesores” en la clase, el docente tiene tiempo de concentrarse en lo que importa de verdad, lo que reduce el estrés y convierte la clase en una experiencia más placentera. Los alumnos también encuentran esta forma de aprendizaje social más llevadera que estudiar solos: nuestros sondeos nos dicen que el 80% de los alumnos no solo encuentran las clases con ChallengeHub más efectivas y útiles, sino también más entretenidas.

Y por último, en un mundo con cada vez más alternativas a la enseñanza universitaria y una presión creciente debido a la pandemia, el incremento en efectividad y disfrute eleva el valor de asistir a la universidad de una forma escalable a la vez que eficiente económicamente.

Conclusión

En ChallengeHub creemos firmemente que el aprendizaje social efectivo debería ser la norma y no la excepción. Cuando se hace esto a gran escala, los centros de enseñanza superior se hacen más efectivas y más valiosas para la sociedad. ChallengeHub puede hacer esto posible, y esperamos trabajar con más y más centros para hacer de nuestra visión una realidad.

James Cannon

El Dr. James Cannon es un profesor asociado en la Universidad de Kyushu.
Es el creador del aprendizaje activo basado en retos y uno de los fundadores de ChallengeHub.